
El Caballo Andaluz es el típico de Andalucía desde hace miles de años. Este caballo ibérico de tipo barroco se encuentra, por tanto, entre las razas equinas más antiguas de las conocidas actualmente.
Índice de contenidos sobre el Caballo Andaluz (o Andalusian Horse).
1 Características
2 Importancia
3 Origen e historia
4 Actualidad
5 Precio.
6 Razones para llamarlo «Caballo Andaluz».
7 El Caballo Cartujano».
8 Poema de Alberti
–
Características del caballo andaluz
El caballo andaluz es una raza de tipo barroco, como se denomina aquella que incluye las características de los caballos de combate de época medieval.Estas características son:
Robustez,agilidad,cuello arqueado,perfil recto o convexoycrines y cola abundantes
Ficha resumen de sus características
Sangre | Templada* |
Tipo | Barroco |
Alzada | 155 – 165 cms. |
Comportamiento | Apacible y dócil, pero con temperamento |
Marcha | Fluida, ágil, decidida y enérgica |
Origen | Andalucía |
Aptitud | Absoluta versatilidad: Paseo, doma clásica, equitación de trabajo, competición, terapia, y monta americana. |
Longevidad | Bien cuidado, con una dieta sana, y ejercicio diario, unos 25 o 30 años. |
* Los caballos de sangre templada son aquellos que tienen una combinación de características de los caballos de sangre caliente y los de sangre fría. Estos caballos suelen ser más dóciles y tranquilos que los de sangre caliente, pero tienen más energía y resistencia que los de sangre fría.
Los caballos de sangre templada son muy versátiles, es decir, adecuados para muchas actividades diferentes, como el trabajo en el campo, la equitación recreativa, la competición y el espectáculo. A menudo se utilizan como caballos de montar y para la equitación de ocio y deportiva.
Morfología
La alzada del Caballo Andaluz (o Andalusian Horse) se considera «media» porque no suele superar el 1’65 m de altura a la cruz. Se trata de un caballo esbelto y estilizado con cuello fuerte, ancho y ligeramente arqueado. Sus formas son elegantes y redondeadas y su pelaje brillante. Sus ojos son vivaces y oscuros, y su pecho amplio.
Comportamiento
En cuanto a su comportamiento, el atributo más destacado del Caballo Andaluz es, sin duda alguna, su dócil temperamento, consecuencia de un perfecto equilibrio biológico. Este animal se manifiesta apacible y de fácil trato, sin mostrar reacciones bruscas ante los estímulos. En caso de enfermedades, especialmente si se trata de alteraciones digestivas, se recupera en un tiempo menor que otras razas, como pudieran ser el Pura Sangre Inglés o el árabe. Además, soporta bien las condiciones adversas como la privación de agua, el calor y el cuidado deficiente.
Aptitudes
Todo ello, unido a su belleza, le hace apto como caballo ideal de silla, siendo también muy demandado como ‘caballo de placer‘ o ‘caballo de paseo’, aunque también resulta perfecto para competir en las disciplinas de doma clásica y doma vaquera.

–
Importancia
Ha sido tal la belleza e importancia del caballo andaluz que, a lo largo de la historia, se ha utilizado para crear y perfeccionar, mediante cruces, otras razas equinas (tanto europeas como americanas) por ejemplo el caballo hispano-árabe (cruce de caballo andaluz con caballo árabe) el hispano-bretón (cruce de yeguas francesas con machos andaluces) el lipizzano, el frisón, el lusitano y el peruano de paso.
Debido a su éxito y prestigio dentro del mundo ecuestre, son notables los esfuerzos desde hace un siglo por cambiar su nomenclatura de Caballo Andaluz por la de «Pura Raza Española» (PRE).
Ya se sabe que todo lo andaluz es solamente andaluz cuando es desconocido y marginal, mientras que cuando alcanza prestigio fama mundial, pasa «por decreto» a ser español, como así ha ocurrido con el flamenco (que antes se consideraba de andaluces ebrios y maleantes) la siesta (que se consideraba de andaluces vagos y holgazanes) y el gazpacho (que se consideraba de andaluces pobres y miserables).
Afortunadamente, en la mayoría de los países aún se utiliza preferentemente la denominación tradicional: Andalusian Horse. Veremos cuánto tiempo resiste al avance del nuevo «PRE» que, por el momento, solo ha tenido éxito dentro de la propia España. Por el momento, numerosos catedráticos de la Facultad de Veterinaria de Córdoba se han mostrado partidarios de recuperar el nombre histórico, tradicional y actualmente internacional: Caballo Andaluz. Entre los mencionados profesores destacan Gumersindo Aparicio, Rafael Castejón, Manuel Gómez Lama, Francisco Santiesteban, y Eduardo Agüera Carmona.
- Interesante artículo de Eduardo Agüera, Doctor en Veterinaria por la Universidad de Córdoba, sobre esta cuestión en diariocordoba.com
–
Origen e historia del caballo andaluz

En primer lugar, es importante reseñar que el primer lugar del mundo donde está documentada la práctica de montar a caballo, es decir, la equitación, es en Andalucía y, más concretamente, en la Cueva de la Laja Alta, localizada en Jimena de la Frontera, a 140 kms. de Cádiz. Allí se encuentra un conjunto de arte rupestre andaluz que representa a un humano montando en un équido y que data del año 4000 a. C.
En cualquier caso, unos 4000 años después, los caballos originarios de la Bética ya gozaban de enorme fama en el circo romano. Pero cuando se tomó verdadera conciencia de la excelencia del Caballo de origen andaluz fue durante la Edad Media, como reflejan testimonios históricos y literarios de la época. De la época de Abderramán I procede la tradición ecuestre denominada «Saca de las Yeguas» que permanece en Almonte hasta nuestros días.
Incluso, desde el siglo XIII hasta el XIX, se estableció una «raya real» al norte de Al-Andalus bajo la cual estaba prohibido cruzar yeguas con asnos en Andalucía y otras zonas limítrofes para preservar la pureza de la raza.
A partir de 1570, las Caballerizas Reales de Córdoba dieron cobijo a los mejores sementales de Caballo Andaluz durante casi 450 años de forma ininterrumpida. Hasta el momento, se habían utilizado los caballos como animales de tiro o transporte y, sobre todo, con fines bélicos. Pero a partir de entonces, el Caballo Andaluz empezó a ser demandado para fines recreativos y deportivos, aprovechando otra de sus destacables cualidades: Su capacidad de aprender rápidamente y retener para siempre lo aprendido. Por todo esto que puede decirse que fue seleccionado como caballo de paz quedando así aún más ligado a la identidad andaluza.
La primacía de este Caballo Andaluz, que entonces pasó a valorarse por criterios estéticos y artísticos, fue tal que, para su cría y conservación, se crearon maestranzas de caballería en Ronda (1573), Sevilla (1670), Granada (1689), Carmona (1728), Antequera (1728) y Jerez (1739), dando el salto a otras maestranzas fuera de territorio andaluz, como las de Valencia, Zaragoza y Palma de Mallorca.
–
Actualidad

En la actualidad, el Caballo Andaluz se ha convertido en un símbolo típico de Andalucía que cuenta con más reconocimiento internacional que en la escena ecuestre española. Supone el motor de un sector generador de gran actividad económica a través de concursos morfológicos, espectáculos ecuestres, clubes, actividades formativas, terapias, e incorporación a los cuerpos y fuerzas de seguridad. Desde 1991, el mayor evento de dicho sector tiene lugar en Sevilla, concretamente en el SICAB (Salón Internacional del Caballo) donde se dan cita ganaderos, veterinarios, expertos y turistas de un centenar de países.

Monarcas y aristócratas de diversas procedencias han querido retratarse o grabarse a lomos de un ejemplar de raza andaluza. Esto ha dado lugar a una profusa la aportación del Caballo Andaluz al patrimonio pictorico y audiovisual internacional. Y además, ésta ha dejado numerosas apariciones cinematográficas (El Señor de los Anillos, Braveheart…) y en obras literarias como el Quijote de Cervantes, y la Fábula de Polifemo y Galatea de Góngora. Por todo esto, su relevancia en el mundo de la cultura también es digno de resaltar.
–
¿Qué precio tiene un Caballo Andaluz?
Como es lógico, el precio de un caballo siempre depende de diferentes factores como como la perfección morfológica, la edad, los premios obtenidos por su ascendencia, y la necesidad que el vendedor tenga de venderlo. El caballo andaluz pertenece a una raza que está excelentemente valorada, por lo que su precio oscila entre la amplia horquilla de los 3000 y 7000 euros en términos generales.
El precio de un Caballo Andaluz puede devaluarse significativamente si presenta problemas de salud, ya que esto puede afectar su desempeño y capacidad para realizar actividades específicas, como la equitación o el trabajo en el campo. La devaluación dependerá de la gravedad del problema de salud y de la duración del tratamiento necesario para su recuperación.
El estado de salud influye decisivamente en el precio
Por ejemplo, si un caballo tiene una lesión temporal en las extremidades que le impedirá trotar o galopar correctamente durante los próximos meses, su precio puede reducirse un 25%. Además, si el tratamiento para la lesión es prolongado (más de un año) y costoso (veterinarios y medicina) también se reducirá su precio por encima de un 50%. Por otro lado, si un caballo tiene un problema de salud que es fácilmente tratable y no afecta su capacidad para realizar actividades específicas (raspones, arañazos, parásitos como pulgas y garrapatas) su precio apenas puede notar variación.
Es importante tener en cuenta que la salud de un caballo es un factor importante en la compra y venta de equinos. Un caballo con buena salud y condición física tiene un valor más alto en el mercado y puede ser vendido a un precio más elevado. Por lo tanto, es fundamental realizar revisiones periódicas del estado de salud del caballo y proporcionarle el cuidado veterinario necesario para mantener su salud óptima.
Comprar un Caballo Andaluz en Andalucía
Como ya hemos visto, Andalucía cuenta con una larga historia y tradición en la cría de caballos andaluces, y la demanda de estos animales sigue siendo alta en la actualidad.
Los precios (que pueden variar según la edad, el sexo, el color y la calidad genética del animal) pueden oscilar entre los 5.000 y los 15.000 euros, e incluso superar esta cifra en algunos casos excepcionales.
En el mercado online, por ejemplo en compraventadecaballos.org, se pueden encontrar caballos andaluces a la venta por precios que van desde los 1500€ hasta los 6000€.En ehorses.es también se pueden encontrar caballos andaluces a la venta con precios que van desde los 5.000€ hasta los 10.000€.
Además, en Andalucía se celebran multitud de ferias ecuestres y eventos de venta de caballos, destacando la Feria del Caballo de Jerez de la Frontera, donde los compradores pueden conocer a los criadores y vendedores y negociar precios. También hay subastas de caballos andaluces de alta calidad, como la Subasta Nacional de Caballos de Pura Raza Española Andaluces en Sevilla, donde suelen subastarse ejemplares de tan altísima calidad.
Comprar un Caballo Andaluz en Francia
El mercado de compra y venta de caballos andaluces en Francia puede variar ampliamente, como es normal, dependiendo del pedigree, edad, entrenamiento y otros factores que afectan el valor de los caballos.
Por ejemplo, un caballo andaluz joven de 3 años sin entrenamiento especializado podría tener un precio aproximado de 5.000 a 8.000 euros. Mientras tanto, un caballo andaluz de alta calidad con entrenamiento avanzado en disciplinas como la doma clásica o la alta escuela puede alcanzar precios superiores a los 25.000 euros.
Además, el mercado de caballos andaluces en Francia también puede verse afectado por la oferta y la demanda. Por lo tanto, el precio de un caballo andaluz en una región particular podría ser más alto si hay una demanda mayor que la oferta.
El mercado francés de caballos andaluces es vibrante y dinámico, con una gran cantidad de criadores y comerciantes ofreciendo una amplia variedad de ejemplares a diferentes precios. Además, el sector equino francés cuenta con una serie de eventos y ferias especializadas en los caballos, como la Feria de Avignon y el Salón du Cheval de Paris, donde se han llegado a realizar incluso exhibiciones de las Caballerizas Reales de Córdoba. Estos eventos ofrecen una excelente oportunidad para que compradores y vendedores se conecten y negocien precios, y para que los amantes del caballo disfruten de una experiencia única.
Comprar un Caballo Andaluz en Reino Unido
En general, se pueden encontrar caballos andaluces jóvenes y no entrenados a precios más bajos, que van desde las £1,000 (unos 1200 €) hasta las £3,000 (unos 3600 €). En contraste, los caballos andaluces entrenados para disciplinas específicas, como la doma clásica o el espectáculo, pueden tener un precio mucho más alto, a menudo superando las £10,000 (12000 €). Además, los caballos que han sido importados directamente de Andalucía pueden tener precios más altos debido a los costos de transporte y los aranceles.
En las plataformas de compra-venta los machos castrados parecen ser más comunes y generalmente son más baratos que las yeguas, aunque hay excepciones. La edad también juega un papel importante en el precio, con caballos más jóvenes generalmente más baratos que los más viejos.
Comprar un Caballo Andaluz en Nicaragua
El caballo andaluz es una mascota de lujo en Nicaragua, especialmente entre los propietarios adinerados de fincas y ranchos, que pueden llegar a pagar más de 20.000 dólares por un ejemplar de alta calidad genética. Según los criadores, invertir en estos animales vale la pena debido a su belleza y elegancia, así como a su lugar en la cultura y la historia de la región. La Asociación Nicaragüense de Criadores de Caballos Pura Raza Española (ANCPRE) organiza una feria cada año para promover la crianza de estos animales, que requieren cuidados costosos y diarios como duchas, alimentación especializada y cuidado veterinario. A pesar del alto precio de un Caballo Andaluz, los criadores afirman que Nicaragua se encuentra entre los primeros lugares en Centroamérica en la crianza de estos ejemplares. Para los criadores, la subjetividad del dueño también influye en el precio de un caballo, ya que cada uno tiene su belleza y se encariñan con ellos.
10 Razones para llamarlo «Caballo Andaluz» y no «Pura Raza Española»
1. Diego López de Haro, caballerizo real de Felipe II, formó la primera reata* que se considera como la fuente de esta raza. Él adquirió más de quinientas yeguas y una treintena de sementales de su elección en Andalucía (los detalles de sus adquisiciones se encuentran en el Archivo de Simancas). En consecuencia, no hay duda de que el origen de esta raza es andaluz.
* Reata es un grupo de yeguas que se crían y mantienen juntas con el único propósito de producir potros de unas determinadas características.
2. Entre Alfonso X y Carlos III, varios reyes emitieron órdenes para proteger a las yeguas andaluzas (debido a su calidad) de la cría con garañones* . La zona llamada «Raya Real» abarcaba las tierras de Murcia, Andalucía y Extremadura, mientras que en el resto de la península se permitía el cruce indiscriminado con las yeguas para la producción de mulas de trabajo.
3. En el siglo XVI existían en España varias razas de caballos, como el caballo castellano, el losino, el asturcón, el balear y otras que han llegado, en su mayoría, hasta nuestros días. Es importante reconocer que a ninguna de esas razas se le atribuyó la denominación «Pura Raza Española» y ni siquiera «español», por lo que no se debería generalizar al otorgar esas denominaciones al Caballo Andaluz. Esto desacredita la afirmación de algunos entendidos que defienden la apropiación nominal de la raza, argumentando que, como el imperio de Felipe II era «español», este caballo era representativo de su imperio. Sin embargo, ese razonamiento es inapropiado porque muchos caballos castellanos y de otras razas también hicieron las Américas y combatieron en Europa.
4. Porque a buenas horas iba un baserritarra vasco a consentir que a la Oveja Latxa se la denominase oveja «Pura Raza Española», o un ganadero gallego a permitir que a la Vaca Rubia Gallega se la denominase vaca «Pura Raza Española», o un ganadero catalán a consentir que a la Gallina Pota Blava se la llamase gallina «Pura Raza Española, o un criador canario a permitir que al Perro de Presa Canario se le llamase perro de presa «Pura Raza Española».
5. Porque denominarlo «Pura Raza Española» sería es un ejemplo más de cómo se puede enajenar la identidad cultural de un territorio definido y característico, en aras de la construcción de una cultura estatal. En el caso concreto de la raza de Caballo Andaluz, que tiene un origen, desarrollo y dominancia absoluta en Andalucía, se ha convertido en una «Pura Raza Española» debido a la ideología del estado-nación, que no digiere nada bien las diferencias culturales y considera todo lo que se produce en el territorio del estado como parte de una homogénea y única cultura española.
6. Porque denominar «Pura Raza Española» a un Caballo Andaluz tiene la misma congruencia que llamar al aurresku o a la sardana o a la muñeira «baile típico español», cuando nadie fuera del País Vasco se sentiría representado por un aurresku, nadie fuera de Cataluña se sentiría representado por una sardana, y nadie fuera de Galicia se sentiría representado por una muñeira.
7. Porque en el resto del mundo el uso de la denominación «Pura Raza Española» es residual, empleandose en una inmensa mayoría las denominaciones «Andalusian Horse» o «Cheval Andalou». La denominación «Caballo andaluz» no sólo es históricamente precisa, sino internacionalmente reconocida, por lo que puede decirse que la propaganda estatalista solo ha hecho efecto de fronteras para adentro, y no de fronteras hacia afuera.
8. Porque la inmensa mayoría de la cría de esta raza se sigue llevando a cabo en Andalucía, como viene haciéndose desde hace siglos. Hoy día, quien quiere comprar un Pura Raza Española Caballo Andaluz suele tener que ir a comprarlo a Andalucía.
9. Porque es obvio que se puede criar, y de hecho se cría, el Caballo Andaluz en diversas zonas de España, incluso de otros países. Pero argumentar eso para defender la invención de un caballo «Pura Raza Española» es como decir que el Flamenco es «Puro Arte Japonés» porque en Japón más de 600 academias flamencas, o que la pizza es «Pura Gastronomía Estadounidense» porque en Estados Unidos hay 75.000 pizzerías.
10. Porque, a tenor de los nueve argumentos anteriores, la denominación «Pura Raza Española» es moderna, localista, doméstica e impuesta, mientras que «Andalusian Horse» o «Cheval Andalou» (Caballo Andaluz) es histórica, documentada, natural e internacional.
Fuentes:
- diariocordoba.com: Caballo español o andaluz. (12-mar-2005).
- es.wikipedia.org: Discusión. (2007 a 2019).
¿Qué es el caballo cartujano?
El caballo cartujano podría definirse como la élite de los caballos andaluces. es considerado una de las sub-razas más prestigiosas y valoradas dentro de la raza de caballos andaluces, debido a su historia y a su calidad como caballo de silla. Se caracteriza por su pelaje gris oscuro y su físico musculoso y elegante.
¿Y cómo se puede identificar si un caballo andaluz es un caballo cartujano?
Ambos comparten muchas características físicas similares debido a que el cartujano es una subraza del andaluz. Sin embargo, hay algunos rasgos que se pueden buscar para diferenciarlos.
Una de las formas más seguras de identificar un caballo cartujano es mediante su pelaje, ya que tienen un pelaje gris que se conoce como «tordo» y es muy característico de esta subraza. El pelaje tordo resulta de la mezcla de pelos y blancos. Según la predominancia de unos u otros, el pelaje tordo es más claro o más oscuro. Además, el caballo cartujano tiene una cabeza grande y ancha, una espalda corta y una cola baja y espesa.
El caballo cartujano es conocido por ser aún más tranquilo y dócil que el andaluz, así que el comportamiento también puede ser un rasgo distintivo. No es difícil imaginar que distinguirlos no es tarea sencilla y que, por tanto, queda solo al alcance de los mayores expertos.
Poema a los Caballos Andaluces de Rafael Alberti
El genial poeta portuense Rafael Alberti quiso enaltecer de esta forma, la belleza del Caballo Andaluz. El escritor simulaba los andares del equino con música y con bailes.
De frente o de perfil, quiebros volando.
Blancos, puros y grandes, inocentes,
rasgos de luz divinos y crecientes,
ciega y honda armonía golpeando,
sois los altos caballos inmortales,
hijos del sol y espumas musicales.
¿Quién no los ve y a quién no les extasía
vuestro rítmico paso, vuestra pura,
perfecta nitidez, vuestra mesura,
vuestro sentido de la geometría?
Sois las medidas, exaltadas luces
que brotan de los campos andaluces.
Yo os quisiera cantar, aunque quisiera
infundiéndoos las savias del jinete,
que dulce y duramente os compromete
el alma que a la música os trajera.
Y nada más, caballos que en el viento
bailaréis en mi solo pensamiento.